En distintos casos, pero en similares circunstancias, varios hombres abusaron sexualmente de mujeres y niñas en Bogotá.
En el caso de alias ‘El Verdugo’ la pieza principal de la investigación, fue el tendido de la cama del sujeto, donde él mismo, en su propia habitación, obligaba a su hijastra, una menor de edad, a grabar vídeos y a tomar fotografías con contenido íntimo, sin que ella pudiera negarse. El hombre la amenazaba con atentar en contra su vida y la de su madre, si lo denunciaba. Presuntamente desde los 11 años de edad, la obligaba a realizar dichas grabaciones, que posteriormente reproducía en las redes sociales, a través de páginas con contenido sexual para adultos.
En el allanamiento, le fueron incautados dos celulares, una torre de computador, una memoria micro SD, una memoria USB y un disco Duro, donde también encontraron vídeos de otras mujeres, no se descarta que también hubieran sido obligadas por el sujeto.
En la audiencia donde le imputaron el delito de pornografía con menor de 18 años y actos sexuales con menor de 14 años, el sujeto no aceptó los cargos, sin embargo, gracias a las pruebas recopiladas por los investigadores, un juez lo cobijó con medida de aseguramiento en la cárcel La Modelo.
Un caso similar en cual una menor de edad fue abusada sexualmente durante aproximadamente cuatro años, la menor tuvo que vivir un verdadero calvario en su propia casa, por cuenta de su padrastro. Dos pequeños hermanos se convirtieron en testigos silenciosos de lo que le ocurría a la menor. La madre de los tres niños, aunque desconocía de los abusos contra su hija, también era objeto frecuente de agresiones y amenazas por parte del hombre, sin embargo, tampoco se había atrevido a denunciar.
Los reiterados maltratos, llevaron a los niños, a ser acogidos en un centro de protección, donde la menor de edad, finalmente confesó las agresiones y de esta manera, las autoridades lograron capturarlo, por los delitos de actos sexuales con menor de 14 años en concurso homogéneo y sucesivo, con violencia intrafamiliar.
Un juez lo envió a la cárcel.
De igual manera, en Usme, un hombre de 47 años, aprovechó la relación sentimental que tenía con una mujer, quien además de abrirle las puertas de su hogar le confió a sus hijas de 6 y 7 años de edad. El sujeto esperaba a que la mujer saliera de la vivienda donde residían, para cometer abusos íntimos contra las niñas, a quienes amenazaba para evitar que le contaran a su madre.
El comportamiento extraño de las niñas hizo que su madre descubriera lo que estaba ocurriendo y sin pensarlo dos veces denunció ante las autoridades. Las pruebas de Medicina Legal fueron contundentes, corroborando el abuso sexual, a pesar de que el sujeto en la audiencia, negó su responsabilidad, se conoció que el capturado ya tenía un antecedente por este mismo delito.
En otro caso, un sujeto con la excusa de tener conocimientos en sistemas y pretender arreglar el computador de la casa, un sujeto aprovechaba la proximidad con sus dos sobrinas políticas, menores de 14 años, para obligarlas a cometer vejámenes y grabarlas.
De acuerdo a la investigación, la madrastra de las niñas, notó el temor que ellas expresaban cuando el sujeto llegaba a la vivienda y ganándose la confianza de las pequeñas, logró que finalmente confesaran y así dar aviso a las autoridades. El capturado de 45 años utilizaba los vídeos que grababa de las menores, para difundirlos en páginas web.
El último caso tuvo lugar en el norte de la ciudad cuando una mujer de 28 años, solicitó un servicio de taxi, al salir de un establecimiento abierto al público.
De acuerdo a lo que denunció a las autoridades, en el trayecto, el conductor habría aprovechado que se encontraba en estado de alicoramiento, para accederla sexualmente, además de hurtarle varias de sus pertenencias y horas después, dejarla abandonada cerca de su vivienda.
Inicialmente el hombre al darse cuenta que era buscado por las autoridades, trató de mantenerse oculto, finalmente fue capturado, por el delito de acto sexual abusivo con persona incapacidad de resistir, en concurso heterogéneo con hurto calificado. El sujeto que tiene antecedentes por homicidio, fue cobijado con medida de aseguramiento en un centro carcelario.