El ente acusador cuenta con el testimonio de uno de los sicarios que participó en el crimen del también abogado de profesión, quien se acogió a principio de oportunidad.
En audiencia de formulación de acusación realizada ante el Juzgado 1° Penal del Circuito de Pitalito (Huila), la Fiscalía señaló al alcalde de ese municipio, Miguel Antonio Rico Rincón, como el probable determinador del homicidio del abogado y líder social Luis Gerardo Ochoa Sánchez, cometido el 6 de abril de 2017 en su propia oficina.
Pese a haber sido debidamente citado, el mandatario local no se presentó a la audiencia; sin embargo, se le dio trámite a la misma con el abogado defensor.
Como elemento clave para acusar de manera formal al burgomaestre, el ente acusador cuenta con el testimonio de unos de los integrantes de la estructura sicarial que participó en el hecho —testigo protegido hoy por la Fiscalía General de la Nación—, quien asegura haber recibido órdenes de Rico Rincón para acabar con la vida de Ochoa Sánchez, lo mismo que de tres personas más, que también son procesadas.
La relevancia del testigo fue avalada por el Juzgado 7° Penal Municipal, con funciones de control de garantías de Neiva (Huila), en audiencia de aplicación de principio de oportunidad.
El líder social, así calificado por la ONU, fue contratado por los feligreses de una iglesia cristiana de esa localidad huilense para que los representara en un negocio que les estaban ofreciendo relacionado con la construcción de una ciudadela, y en la que ellos detectaron anomalías, pues el lote donde se haría la construcción había sido vendido a una constructora que nada tenía que ver con el proyecto.
Tiene pruebas el ente acusador además, que días antes del homicidio, el abogado habló con el mandatario local sobre el tema para advertirle sobre las irregularidades detectadas, ya que él había presentado el proyecto ante la comunidad.
Actualmente se encuentran vinculadas al proceso un total de 12 personas.
La Fiscalía hace pública esta información por razones de interés general.