Cinco mujeres, seis niños y un adulto mayor, vivían en una volqueta en el barrio Tequendama del municipio de Pitalito, sur del departamento del Huila.
La familia había tomado como sitio para vivir, una volqueta estacionada en un predio de dicho barrio; en la cual habían colocado un colchón y lonas para cubrirse del frío. Todos dormían en el mismo lugar.
Hasta el sitio llegaron las autoridades para brindarles atención desde la personería municipal, el ICBF, en coordinación con Secretaría de Gobierno; quienes se encargaron de gestionar el regreso de esta familia a su lugar de origen en el Caquetá.
Según se conoció la familia hace parte del resguardo indígena “Maticuru”, del municipio de Milán Caquetá.
El grupo de la Policía de infancia y adolescencia se encargó de realizar las diligencias respectivas y con el apoyo del gerente de la terminal de transportes de Pitalito, quien asumió el costo de los pasajes, fueron llevados hasta el departamento vecino, donde se reunieron con su comunidad indígena.
