José Darío Muñoz de 35 años, había estado trabajando por un buen tiempo como conductor de un bus en la empresa Rápido Tolima, pero hace una semana, decidió trabajar como taxista en la ciudad de Neiva, donde estaba asumiendo el turno de la noche.

En la noche del domingo 11 de noviembre, recogió una carrera en el barrio Jorge Eliecer Gaitán, donde abordaron el vehículo dos hombres y una mujer, de acuerdo a la información ofrecida, cuando se desplazaban a la altura del barrio Las Américas, los pasajeros que en realidad eran delincuentes, usaron armas de fuego, para hurtarle las pertenencias a José Darío, pero en su intención por defenderse se opuso al atraco, por lo que le dispararon en la cabeza.

El conductor herido, perdió el control del vehículo y se volcó en el lugar antes de morir; producto del accidente la mujer que viajaba junto a los otros dos delincuentes, sufrió varias lesiones.

La rápida reacción de la policía, permitió la captura de la mujer herida y otro de los delincuentes, uno de ellos huyó con el arma de fuego con el que asesinaron al taxista, sin poder lograr hurtarle las pertenencias al conductor.

La víctima conducía el taxi de placa VZS – 325, dejó a una esposa y tres niños entre ellos a una bebé recién nacida.

El gremio de taxistas, rechazaron el crimen, exigiendo más seguridad en la ciudad de Neiva, especialmente en las noches.

 

 

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