En el clip el niño demuestra que los mensajes de texto, snaps, videos, memes, hashtags y publicaciones de Facebook, Twitter, Instagram, o Snapchat pueden ser utilizados para agredir a alguien.
En el video se ve a Luke caminando por su ciudad y recibiendo constantes ataques digitales, cuyas heridas quedan transformadas en verdaderos golpes a su cuerpo a medida que avanza la historia.
El clip fue compartido en su canal de Youtube el 8 de febrero y se ha vuelto popular en pocos días.