José Onorio Ordoñez Trujillo, de 28 años, al parecer se había ganado uno que otro problema por hurto, según la versión de los vecinos de la vereda Los Olivos del municipio del Pital, pero nunca imaginaron que lo seguirían para matarlo.
El jueves 11 de agosto un hombre de raza negra, cabello ondulado y contextura delgada, quien dijo llamarse Edwin, llegó al medio día a la Finca La Cabaña de la vereda los Olivos, realizó su actividad normal como recolector de café y cerca de las 6 y 30 de la tarde salió a hacer una recarga a la tienda y nunca más volvió ni siquiera por el pago de su trabajo, indicó el administrador de la finca.
“Ya se estaba oscureciendo cuando mi esposo llegó gritando que lo iban a matar, y detrás de él venía un hombre negro, alto y delgado, con gorra, tenía un camibuso de rayas, pantalón oscuro, y andaba con un carriel, entró de tras de mi esposo, le disparó y se fue” Así narró aún sin comprender que pasaba la esposa de José Onorio, a quien el sujeto le propinó varios disparos en diferentes partes del cuerpo con arma de fuego tipo pistola.
Todo parece indicar que el misterioso hombre que se presentó como recolector de café, fue el mismo que persiguió a José Onorio hasta el patio de su casa hasta segarle la vida, pues según la versión, la víctima fue sorprendida por un sujeto que inicialmente le disparó en dos ocasiones, causándole lesiones y cuando quiso reaccionar tratado de huir, el agresor lo siguió, lo alcanzó y le propinó varios impactos que le ocasionaron su muerte de manera inmediata.

Por ahora las autoridades investigan para dar con la captura del agresor y de igual manera advierten a los administradores y propietarios de fincas la necesidad de corroborar los datos de las personas que emplean en sus parcelas para evitar consecuencias lamentables, de hurtos o incluso homicidio, como el caso sucedido.

