El caso comenzó a generar preocupación al punto que el personero de Pitalito solicitó explicaciones a las directivas del centro penitenciario de este municipio y respondieron indicando que la muerte no fue a causa del COVID19, en el fallecimiento de un joven de 22 años registrado hace pocos días.
Las especulaciones no se hicieron esperar cuando el joven murió en una clínica de Neiva después de haber sido remitido desde la Cárcel al Hospital de Pitalito y después a una clínica en Neiva donde Murió el pasado 21 de abril.
Al interior de la cárcel las enfermedades se mantienen en todos los ámbitos por las mismas condiciones de confinamiento extremo y la gran cantidad de internos que saturan el penal superando casi el 50% como en casi todo el país, el Director lo había denunciado hace varios días.
“El hecho de que el coronavirus llegará no quitó las otras enfermedades y ellas se mantienen con los controles, pero con los riesgos que genera en tener a una gran cantidad de personas privadas de la libertad” indicó un profesional de la salud consultado por este medio.
Por su parte los familiares del joven fallecido confirmaron la versión emitida desde la cárcel de Pitalito, sin embargo, se mostraron preocupados por otras circunstancias que allí se registran.
La muerte de Nelson y la preocupación de su familia.
Los familiares confirmaron que Nelson no murió de Coronavirus pero expresaron sus preocupaciones, Nelson era un interno de 22 años del pabellón 11, quien falleció por un problema del corazón; lo preocupante del caso es que 7 internos que están en el mismo patio donde estaba la víctima, presentan algunos síntomas parecidos de la persona fallecida y al parecer la atención es compleja y precaria por las mismas condiciones de hacinamiento, según informaron familiares del recluso que falleció.
Murió por aneurisma aórtico
Igualmente ellos, los allegados a Nelson confirmaron a Aldea sur que “el diagnóstico médico que nos dieron es que él falleció por un aneurisma aórtico, probablemente producido por bacterias de salmonella adquiridas en la penitenciaría de Pitalito y no de Covid-19 como habían estado especulando” El tema aún no ha sido confirmado ni desvirtuado por directivas del penal y al parecer se avanza en una investigación sin datos confirmados.
“Con lo que le pasó con Nelson, nos preocupa ahora es que el Inpec no está haciendo nada por los otros muchachos que también están enfermos, según sabemos tienen los mismos síntomas: pérdida de conocimiento, dolor al lado izquierdo del pecho, vómito, adormecimiento en sus manos”, asegura uno de los familiares del recluso fallecido.
Sobre este tema, un médico consultado indicó “que varios reclusos tienen enfermedades que vienen siendo supervisadas dentro de la gestión médica del penal normal y es posible que se presente un caso de Covid-19 más adelante, esperemos que no, pero por ahora no hemos tenido ninguno”, ratificó.
Los médicos estaban de vacaciones.
Nelson Torres Imbachí, sintió su mayor afectación de salud el 8 de abril, donde fue atendido en la enfermería del centro penitenciario y regresó en mal estado de salud a su celda, bajo un calmante para el dolor que le ofreció una enfermera, porque los médicos estaban de vacaciones por Semana Santa – Indicó la fuente familiar – al día siguiente llamó a la familia, para que le ayudaran porque se sentía muy mal, finalmente lo atendieron en el hospital de Pitalito y por la gravedad que presentaba, decidieron remitirlo hasta Neiva a pesar de las complicaciones por la pandemia.
Estando en Neiva, confirmaron a la familia que tenía un infarto agudo, lo que obligó a una intervención quirúrgica, que desarrolló complicaciones que causaron días después, su muerte de manera cerebral.
“Por si no fuera suficiente con la tragedia familiar, tuvimos que cubrir los gastos de la atención médica que le prestaron en Pitalito, porque a pesar de llevar 7 meses recluido, no estaba afiliado al sistema de salud obligatorio al que tiene derecho toda persona privada de la libertad en un centro carcelario”, Indicó un integrante de su familia
Afiliación en salud.
Sobre el particular algunos funcionarios consultados indican que para este tipo de casos existen dos acciones para la atención de salud de los internos.
1- Existe en la oferta de las penitenciarías en Colombia que ofrecen el sistema de salud por defecto que se hace con una aseguradora asunto que, al parecer, no aceptó Nelson.
2- Los reclusos que se mantengan con su afiliación independiente, como fue el caso de Nelson quien, al parecer, se mantuvo en el régimen contributivo por decisión de él y por tal razón en caso de atención médica se asumen los copagos y demás servicios como cualquier usuario, esa decisión es de ellos si se mantienen en su afiliación o asumen la que les ofrece el INPEC ratificó un médico del centro carcelario.
Por ahora lo claro es que Nelson no murió de Coranavirus, el hacinamiento se mantiene y los problemas de salud siguen latentes con la preocupación de los mismos internos, familiares y funcionarios del Inpec que reconocen la compleja situación y el riesgo que se vive en estos centros carcelarios de todo el país por la forma de convivencia y la cifra elevada de reclusos que supera lo normal de un penal como Pitalito.
Ojalá no suceda como en Villavicencio y que las autoridades de salud atiendan a nivel departamental con prioridad los centros carcelarios y muestren las condiciones y estadísticas de seguimiento para poder evitar un contagio masivo y las condiciones reales de los reclusos en las 4 cárceles del departamento del Huila como lo son Pitalito, Garzón, La Plata y Rivera.
Por parte del director del centro carcelario, se adelanta la gestión para permitir que algunos de los reclusos, puedan tener libertad temporal, para reducir el hacinamiento y un contagio masivo de internos durante la pandemia, como se ha anunciado desde el alto Gobierno dentro de la normatividad del estado en la temporadad de Coronavirus.
AQUI PUEDE VER EL COMUNICADO OFICIAL DE LA CARCEL DE PITALITO.