La exgerente de aguas del Huila, Amanda Silva Duarte, será condenada por los delitos de prevaricato e interés indebido en la celebración de contratos. La ex funcionaria fue llevada a juicio por irregularidades en la adjudicación de un contrato. “Revocó indebidamente la adjudicación del contrato que el comité evaluador y la misma gerente conoció”, dijo el juez de conocimiento.
“Modificó el pliego después de adjudicado el contrato, cuestión que es reprochable…”, sentenció el juez al anunciar que la exgerente de aguas del Huila, Amanda Silva Duarte, será condenada por las irregularidades en la adjudicación del contrato de más de dos mil millones de pesos para el sistema de acueducto del corregimiento de Bruselas en el municipio de Pitalito.
La condena será impuesta por el Juez Tercero Penal del Circuito de Neiva con Funciones de Conocimiento, luego de analizar las pruebas documentales y testimoniales presentadas por la Fiscalía Doce Seccional de Neiva.
La ex gerente Amanda Silva fue hallada responsable de los delitos de interés indebido en la celebración de contratos y prevaricato por acción.
El contrato, adjudicado por licitación pública y que enredó ante la justicia penal a la ex funcionaria, tenía como objeto la construcción del sistema de acueducto del corregimiento de Bruselas en el municipio de Pitalito.
La investigación contra la entonces Gerente de Aguas del Huila, comenzó con la denuncia por la adjudicación irregular del contrato por valor de 2001 millones 604 mil 650 pesos al consorcio Acueducto de Pitalito II.
Según la denuncia y las pesquisas del ente acusador, el convenio había sido ganado en la licitación por el consorcio Aguas Bruselas, adjudicado mediante la resolución 945 del 30 de diciembre de 2011.
Sin embargo, Silva Duarte revocó la resolución de adjudicación del contrato mediante la también resolución 046 del 26 de enero de 2012, “supuestamente porque uno de los ingenieros del consorcio Aguas Bruselas no tenía la experiencia exigida”, dijo la Fiscalía.
Agregó que la ex funcionaria adjudicó el convenio al consorcio Acueducto de Pitalito, que quedó de tercero en la licitación pública. “Debía haber adjudicado el contrato al consorcio Acueductos de Colombia que fue el segundo en la invitación pública”, manifestó la fuente.
“Obró con conocimiento y voluntad”
La ex gerente de Aguas del Huila fue hallada responsable en el delito de interés indebido en la celebración de contratos, porque se interesó en beneficio del consorcio Acueducto Pitalito, “pues a pesar de haber sido rechazada su propuesta en audiencia de adjudicación del 30 de diciembre de 2012, la habilitó nuevamente para adjudicarle la licitación”, dijo el togado.
Sobre el delito prevaricato por acción se fundamentó en que la gerente revocó la resolución 945 de 2011 por medio de la cual se había adjudicado la licitación al consorcio Aguas Bruselas 2011 a través de la resolución 047 de 2011 cuyas consideraciones son manifiestamente contrarias a la ley “el fin propuesto era habilitar el consorcio Acueducto Pitalito para adjudicarle la licitación”.
Sostuvo el juez que la entonces gerente de Aguas del Huila, Amanda Silva, modificó el pliego después de adjudicado el contrato “cuestión que es reprochable y puso en desventaja a todos los proponentes por cuanto no se pueden cambiar las reglas de juego cuando ya terminó un proceso de adjudicación…”.
Señaló que revocó “indebidamente” la adjudicación del contrato que el comité evaluador y ella misma conocieron y rechazaron la propuesta de Acueducto Pitalito y “después resultaron habilitándolo y adjudicando el contrato, es decir que la Gerente actúo contra los fines de la administración pública su formación profesional en el área de la ingeniera y vasta experiencia son hechos indicadores de que obró a título de dolo, pues procedió con conocimiento y voluntad”.
Cortesía: OLE Mi Diario, Neiva.