De acuerdo con la versión conocida, habitantes del municipio de San Agustín dieron aviso a la policía sobre las presencia de unos hombres extraños en el centro del municipio.
Cuando los uniformados se acercaron a los sujetos, estos les manifestaron que pertenecían al batallón magdalena y estaban en una misión especial, por lo que los policías les sugirieron ir hasta la estación para verificar que en realidad hacían parte de la institución militar.
Enfurecidos por ser llevados hasta la estación se enfrentaron contra la subteniente Evelyn Castro, comandante de la Estación de Policía de San Agustín, agrediéndola verbalmente y con la intención de empujarla y golpearla.
Tras unas llamadas se logró establecer que los dos soldados sí pertenecen al Batallón Magdalena, no obstante, el sargento del cual se omite el nombre por derecho a su intimidad se negó identificarse, aludiendo que no tenía por qué hacerlo y menos ante una oficial con poca trayectoria.
Aunque el suboficial militar menospreció la labor de la subteniente por ser mujer, ella sólo registró el caso en el libro de la Estación, para no generar inconvenientes y evitar que el tema pasara a mayores.
Con este caso se evidencia que a pesar de las campañas a nivel nacional, sin importar el cargo, las circunstancias o la fortaleza que se tenga las mujeres siguen siendo víctimas de maltrato por parte de los hombres.