En una semana la ANLA se pronunciará sobre cierre definitivo de El Quimbo
En A pocos días están los opitas de conocer la crucial decisión de que la hidroeléctrica cierre sus puertas o siga operando, la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, pidió a la Gobernación del Huila conceder ocho días adicionales para responder por la aplicación del Principio de Precaución que solicitó el gobernador Carlos Julio González Villa.
El pasado 15 de mayo, la Gobernación del Huila solicitó a la ANLA aplicar el Principio de Precaución y ordenar suspender la licencia ambiental del proyecto hidroeléctrico El Quimbo, al establecer que existen “serias dudas” sobre los estudios y la información técnica sobre los cuales se sustenta el diseño y la ejecución del proyecto hidroeléctrico.
La respuesta que la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales debe dar al Departamento busca que, además, se ordene a todas las autoridades competentes pronunciarse respecto de las posibles afectaciones provocadas por la construcción y operación de El Quimbo, y tomar medidas preventivas “en lo que tiene que ver con la defensa del territorio y su población”.
Javier Roa Salazar, asesor de asuntos mineros del Gobierno Departamental, dijo que el oficio que envió la ANLA señala que, como es un tema eminentemente técnico, esta consulta debe resolverse “con bases científicas y técnicas”.
Roa Salazar indicó que se procederá a analizar con el equipo de coordina en la Secretaría de Gobierno esta solicitud de prórroga que hizo la ANLA.
“Así mismo estamos pendientes de que se tome una decisión y queremos conocer los dos actos administrativos mediante los cuales se da respuesta a la Audiencia Pública que se llevó a cabo en e Garzón los días 11 y 12 de noviembre del año pasado. Ya han pasado casi siete meses y la autoridad ambiental no ha dado respuesta. Para ello hemos invocado una acción de cumplimiento de tal manera que estamos expectantes a este pronunciamiento que aspiramos sea favorable para los intereses de los afectados con el proyecto El Quimbo en todo el Huila”, agregó Roa Salazar.

El proceso

A partir de diferentes informes técnicos, la Gobernación del Huila solicitó determinar la realidad en torno a las consideraciones técnicas para construir la hidroeléctrica, y los impactos sociales, ambientales, económicos y de comportamiento hidráulico ocasionados por la obra.
La petición se sustentó en un informe de la Contraloría General de la República, que en su documento final de 2014 señaló que “la Licencia Ambiental y posteriores modificaciones del Proyecto Hidroeléctrico El Quimbo no cumple con los requerimientos técnicos mínimos que garanticen el análisis de los posibles escenarios de riesgos”.
Entre esos escenarios, están los provocados por las amenazas del comportamiento de caudales y crecientes de la cuenca alta del río Magdalena, la ausencia de una zonificación por amenaza del volcán nevado del Huila y volcán Sotará, y del riesgo de sismos en toda la región.
Además, es fundamental conocer los riesgos derivados de filtraciones en la obra de la hidroeléctrica.

Un documento técnico que contrató la Gobernación del Huila con la Corporación y Grupo de Investigación Geoambiental Terrae evidenció “múltiples inconsistencias en el tema de la información técnica del proceso de implementación del proyecto antes, durante y después de poner en marcha la generación de energía eléctrica”.
La solicitud que la Gobernación del Huila elevó a la ANLA pidió “correr traslado a Emgesa” (constructora y operadora de El Quimbo), para que “se pronuncie y presente el correspondiente plan de contingencia o riesgo, de acuerdo con los parámetros establecidos por la autoridad ambiental”.
También solicitó que se ordene “una visita técnica con el acompañamiento de los organismos de control, la Anla, la Corporación Autónoma del Alto Magdalena y el Gobierno Departamental, encaminada a verificar las inconsistencias denunciadas en el presente documento”.

Reclamación desde la Mesa Temática

Las peticiones formuladas desde la Gobernación del Huila hacen parte de un extenso camino que planteó el gobernador Carlos Julio González Villa, y que se concretó hace más de un año a través de la creación de la Mesa Temática por la Defensa del Territorio y el Agua.
Resultado de una amplia participación ciudadana, en especial de las comunidades afectadas por la construcción de la hidroeléctrica El Quimbo en el centro y parte del occidente del Huila, fue posible avanzar hacia la convocatoria de una

Audiencia Pública Ambiental.

Fue el primer ejercicio de su índole en el país en torno a los impactos sociales, ambientales, económicos y técnicos por la construcción de un proyecto hidroeléctrico, y la primera vez en el Huila en que las comunidades afectadas, autoridades y académicos pudieron confrontar directamente a Emgesa.
El principio de precaución es un concepto que respalda la adopción de medidas protectoras “ante las sospechas fundadas de que ciertos productos o tecnologías crean un riesgo grave para la salud pública o el medio ambiente, pero sin que se cuente todavía con una prueba científica definitiva de tal riesgo”.

Fuente Diario La Nacion 6 de Junio de 2017

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