Después de tres años del feminicidio contra Myriam Ovalle Tellez en Pitalito, finalmente unidades del Gaula de la Policía lograron capturar a Hermes Cabrera Pascuas, esposo de Myriam y presunto responsable de su muerte.
Las primeras versiones apuntan a que “Él tenía otra compañera, pero quería quedarse con los bienes de Myriam”, indicó la Fiscal.
“La picó en pedacitos y la arrojó a la orilla de un río”, indicó la Fiscal del caso. Myriam Ovalle Téllez habría sido asesinada a manos de Hermes Cabrera Pascuas, quien, en las audiencias concentradas, no aceptó los cargos imputados”.
Los hechos
Todo empezó desde junio de 2016 cuando Myriam Ovalle Téllez notó que su esposo con el que convivía desde hace 14 años ya no era el mismo, unos meses después descubrió que Hermes Cabrera Pascua le era infiel; casi a finales de octubre de ese mismo año no aguantó más y le hizo el reclamo.
El 25 octubre de ese año, Hermes, su esposo la agredió físicamente tomándola por el cuello y arañándola detrás de la oreja, según ella en medio de la fuerte discusión la amenazó diciéndole que si no le hacía las escrituras de la casa a nombre de él la mataría, por lo que ella dejó en una denuncia que si algo le pasaba era por su esposo, porque no tenía enemigos.
Así transcurrió el resto del año hasta que en enero de 2017 ella decidió separarse y empezaron a repartir sus bienes, para hacer el trámite legal del divorcio, pero el sábado 4 de febrero de 2017 su historia tomó un giro, que finalmente las autoridades están a punto de resolver.
Ese día fue la última vez que vieron a Myriam Ovalle Téllez de 51 años, residente en el barrio las Acacias de Pitalito, una mujer trabajadora que velaba por sus padres de la tercera edad y ayudaba a la atención de su progenitor que no se puede valer por sí mismo.
Su familia en el relato a la justicia cuenta que ese sábado fue al centro a comprar una estufa y cotizar una nevera, diligencia que fue acompañada por su ex esposo, quienes se movilizaban en una camioneta de transporte público que ella recientemente había adquirido; en horas de la tarde sus 3 hijas menores de edad llegaron hasta la casa de Blanca Emma, la mamá de Myriam indicándole que su mamá no había regresado, fue allí cuando empezaron los primeros momentos de angustia y de búsqueda incansable.
Pasaron los días y Myriam no regresó, pusieron la denuncia, imprimieron carteles, la buscaron en otros municipios donde familiares y amigos, pero ninguna noticia recibieron de ella.
El tiempo transcurría y poco a poco el esposo se fue apoderando de los bienes que ella tenía y al parecer se fue para Neiva con una de las camionetas y se llevó las niñas. Aseguran sus familiares.
El 5 de abril de 2017 fueron encontrados en el sector de Vegas de Alumbre en la parte baja del corregimiento de Chillurco en Pitalito unos restos óseos pertenecientes a una mujer, “Los funcionarios judiciales, encontraron un cráneo incompleto, sin el maxilar inferior, un jean azul y un cinturón. Además, los restos óseos hallados tenían fracturas en el abdomen, fracturas en el fémur y cúbito”, agregó la fiscal. El protocolo de necropsia indicó que la causa de la muerte fue violenta. Estos restos fueron enviados a medicina legal en Bogotá, donde corroboraron que se trataba del cadáver de Myiriam,
Pasaron 9 meses, con la ilusión y la esperanza que ella regresara, pero con el temor de un secuestro o de un homicidio; el día de su desaparición vestía una blusa verde con flores, blujean y zapatillas doradas, las mismas que tenían los restos de un cuerpo descuartizado en zona rural de Pitalito.
Corroboraron que era ella.
Al encontrar las osamentas, los funcionarios judiciales, tenían sospechas que correspondieran a los de Myrian, sin embargo, la duda los asaltó, pues la mujer había sido reportada como desaparecida hacía tan solo dos meses y el tiempo trascurrido no correspondía para que el cuerpo estuviera ya en avanzado estado de descomposición.
“Para aclarar esta duda, se solicitó la realización de un examen de ADN con la madre de la víctima, Blanca Ema Téllez y después de varios días de larga espera, los investigadores quedaron sorprendidos, pues el resultado fue positivo, los restos correspondían a los de Myriam Ovalle”, añadió la funcionaria judicial.
Un extenso trámite tuvieron que vivir sus familiares, para que los restos que hallaron les fueran entregados, y finalmente poder hacer su duelo.
Detención y audiencias.
En relación al caso se conoció que unidades del Gaula de la Policía materializaron la orden de captura contra Hermes por los delitos de feminicidio agravado en concurso heterogéneo con desaparición forzada y agravada, logrando su captura en el municipio de Planadas Tolima donde se ocultaba.
Ya en las audiencias concentradas, la fiscal del caso expresó que el 8 de febrero (Hermes) denunció que Myriam desapareció e indicó que la acompañó a realizar unas compras, “y él quien era su excompañero sentimental la había acompañado a adquirir materiales de construcción para hacer las adecuaciones a un apartamento donde la mujer iba a vivir con su nueva pareja”.
Sangre en la camioneta
Asimismo, la investigación permitió establecer, que donde fueron encontrados los restos óseos, se trató de una escena de disposición, por tanto, el sitio donde se encontraron, no fue el sitio donde fue asesinada esta persona, que fue transportada en un carro.
Ante este hecho “se le hicieron estudios con luces forenses a la camioneta de placa THR-449 que era de la víctima y se encontró que en el carro habían transportado algo que tenía gran cantidad de sangre, pues el reactivo colocado al vehículo da luminiscencia (alumbra), cuando se tiene contacto con sangre y era mucha la encontrada en el vehículo”, señaló la fiscal.
El aporte de las cámaras de seguridad, también fue importante, donde quedó registrado parte del recorrido que ella hizo en Pitalito, pero no fue posible verificar el último lugar donde estuvo, según lo que indicó el esposo de Myriam a la familia, él la dejó en el sector de la galería y no supo más de ella.
Asimismo, la funcionaria judicial y analizando todas las pruebas recopiladas agregó. “Él tenía otra persona, pero quería quedarse con los bienes de Myriam. La finalidad del crimen era quedarse con los bienes”.
Finalmente, se logró conocer que este sujeto, si es hallado responsable y fue dejado en centro carcelario, donde podría enfrentar una pena hasta de 50 años.
Myriam y su familia son desplazados del departamento del Cauca y llegaron a Pitalito buscando una nueva opción de vida sin imaginar que aquí sería su fin.
Su familia en medio del dolor exige justicia para que su asesinato no quede impune y pide a los hombres que cuiden y amen a sus esposas, que no las maltraten, que no deben haber más feminicidios.