Creencias populares que ya fueron desmentidas por la ciencia.
En esta época, la gripe está a flor de piel. Lavarse las manos, tomar las precauciones adecuadas y cuidar la ingesta vitamínica no es garantía de evitarla. Como explica la doctora Sandra Fryhofer, quien fue presidenta del Colegio Estadounidense de Médicos y trabaja en el Piedmont Hospital de Atlanta en Estados Unidos, los resfriados y la gripe son provocados por un virus, no por la exposición a bajas temperaturas. Sin embargo, es importante estar bien informados para evitar la propagación del virus y prevenir la enfermedad.
1. Un resfriado puede acabar convirtiéndose en una gripe
Falso. El resfriado común y la gripe son enfermedades respiratorias, pero las provocan virus distintos, según explicó a The Huffington Post el doctor Kenneth Steier, decano de Educación clínica y profesor de Medicina en la Touro College of Osteopathic Medicine de Middletown de Nueva York, Estados Unidos. Parecen idénticas porque ambas provocan síntomas similares a los de la gripe.
Pero, ¿cuál es la diferencia? La gripe causa síntomas más severos que el resfriado (fiebre, dolor muscular, cansancio extremo y tos seca). Sin embargo, el resfriado común suele provocar secreción o congestión nasal. Además, un resfriado no suele tener complicaciones que hagan necesario acudir al médico. Calculan que, cada año, hospitalizan en Estados Unidos a más de 200.000 pacientes por complicaciones relacionadas con la gripe estacional.
2. La gripe es grave
Verdadero. El Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) estima que entre un 5 y un 20 por ciento de personas sólo en Estados Unidos se contagian de gripe cada año y que, además, solo en 2015, 146 niños murieron. «Esta ya es una buena razón para vacunarse», recordó Steier. «Las personas que padecen asma o problemas de corazón o que tienen más de 65 años tienen más riesgo de fallecer o de salir mal parados tras una gripe, pues su sistema inmunológico no es lo suficientemente fuerte». Las mujeres embarazadas, por otra parte, también son un grupo de riesgo.
La gripe puede ser muy grave y debe ser tratada correctamente en niños (iStock)
La gripe puede ser muy grave y debe ser tratada correctamente en niños (iStock)
3. Hay que comer poco para acabar con la fiebre
Falso. De hecho, el cuerpo necesita lo contrario. «La fiebre es una reacción perfectamente normal que se produce cuando el cuerpo está intentando acabar con un virus como el del resfriado o el de la gripe», explicó Steier. «La fiebre no tiene nada que ver con la cantidad de comida que se ingiere». Hay que beber más líquidos para rehidratarse y mantener un nivel calórico normal para reforzar el sistema inmunológico.
4. Tanto el calor seco como el frío son perjudiciales
Parcialmente falso. «Sí, el frío da frío y el calor da calor, pero ninguno de los dos es el culpable de la gripe o del resfriado. Los culpables son los virus», explicó Steier. Aunque uno no se resfríe por culpa del viento, el aire húmedo puede ayudar si se padecen dificultades respiratorias, apuntó Fryhofer. Ducharse, ir a una sauna o utilizar un humidificador de aire frío pueden contribuir a aliviar los síntomas respiratorios característicos de la gripe y del resfriado.
5. No hay que salir con el pelo mojado para evitar la gripe
Potencialmente falso. Según Steier, no hay pruebas científicas que sostengan este viejo mito. Las bajas temperaturas en otoño y en invierno coinciden con la temporada de gripe y de resfriados, pero que el pelo esté mojado no tiene nada que ver con la gripe. Si no se puede utilizar el secador por falta de tiempo, no pasa nada, la salud no se verá perjudicada.
Contrario a lo que se cree, el clima no determina la aparición de una gripe (iStock)
Contrario a lo que se cree, el clima no determina la aparición de una gripe (iStock)
6. La vacuna de la gripe es la causante de la gripe
Falso. En el ámbito de la medicina, se sabe desde hace mucho que la vacuna de la gripe no transmite la gripe, pero aún así este rumor sigue circulando. La CDC afirma que los síntomas más comunes de la vacuna consisten en molestias, enrojecimiento, sensibilidad o hinchazón en la zona de la inyección. Puede que algunas personas experimenten dolor de cabeza, fiebre moderada y dolor muscular, pero de ninguna manera el virus de la gripe.
7. Hay que evitar los lácteos si se está enfermo
Falso. «Los productos lácteos provocan más flemas». Esta frase la han escuchado muchos enfermos de asma, especialmente cuando eran pequeños. «No es verdad, a no ser que se tengan problemas de salud relacionados con los productos lácteos», desmiente Steier, refiriéndose a la intolerancia a la lactosa y a las alergias alimentarias. «Sólo entonces no se deben consumir productos lácteos si se está enfermo. No existe relación alguna entre los lácteos y las flemas».
8. Si uno se vacuna contra la gripe, se volverá inmune
Falso. Generalmente, las vacunas nos protegen de los subtipos H1N1, H3N2 y el Influenzavirus B. Sin embargo, sólo cubren entre un 70 y un 80 por ciento de los virus de gripe existentes en cada temporada, señaló el doctor. Contagiarse de gripe una vez no significa volverse inmune. Aun así, es mejor prevenir que curar.
La fiebre es uno de los síntomas más comunes de la gripe (iStock)
La fiebre es uno de los síntomas más comunes de la gripe (iStock)
9. No hay que hacer ejercicio
Falso. «Cuanta más actividad física realices, menos resfriados tendrás», dijo Fryhofer; «el ejercicio ayuda a prevenir los resfriados». Aunque, si ya estás congestionado, el ejercicio no lo puede curar. Si tienes intención de ir al gimnasio estando resfriado, asegurate de limpiar las máquinas que utilices después y de lavarte las manos a menudo para no contagiar a otras personas. Si no te interesa seguir tu rutina de ejercicio, hacé lo que te pide el cuerpo. Limitate a estirar en casa.
10. Al toser, hay que taparse la boca (con las manos)
Falso. «Eso puede contagiar a otras personas», alertó Steier. ¿Cómo? Por ejemplo, una persona tose cubriéndose la boca con la mano y luego le da esa mano a otra persona o abre una puerta con esa mano. Lo correcto es toser tapándose con el brazo. Si uno nota que se tapó la boca con las manos al toser, es aconsejable lavarse o utilizar un desinfectante de manos para evitar la propagación de gérmenes.