El primer ferrocarril que se construyó en Colombia fue el de Panamá, y esto no mucho después de haberse construido en Inglaterra el primero de todos. La empresa tuvo alto interés mundial, pues ese Ferrocarril de Panamá sería el primero de índole interoceánica al enlazar los océanos Pacífico y Atlántico; debería superar la divisoria de aguas entre ambos mares. Un fabricante de locomotoras de Cincinatti, George Escol Sellers, ofreció una locomotora especial para fuertes pendientes que permitía aumentar el esfuerzo de tracción con un motor adicional de vapor que por medio de un riel central de caras laterales planas y dos ruedas horizontales, planas también, lo presionaban para no patinar. Cuando llegaron al terreno los primeros ingenieros de trazado, encontraron suaves lomas y no la cordillera que imaginaban. Cablegrafiaron al puerto para ordenar quitarle el aditamento a la primera de tres locomotoras que estaba lista para ser embarcada. Así llegó a Panamá y a las dos restantes nunca se les puso el aditamento. A Sellers nunca le pagaron el trabajo hecho en esos motores auxiliares. Colombia se perdió de haber tenido una de las locomotoras más raras del mundo. Por esos días no estaba estandarizada del todo la locomotora de vapor, que desde su inicio tuvo dos características fundamentales presentes ya en la primera que se fabricó en Inglaterra, a saber: la caldera estaba atravesada a lo largo por tubos por donde pasaba el aire caliente del hogar, tubos de fuego, y tenía caja de humos frontal con el tiraje de la chimenea ayudado por el vapor que expelen los cilindros. Un poco más tarde el diseño de locomotoras se fue estabilizando, todas se parecían unas a otras salvo detalles de fabricación y estilo de diseño que marcaron un ‘american look,’ un ‘german look’ o un ‘british look’, o también hasta un ‘Colombian look’, como se verá aunque no se crea.

La Compañía del Canal de Panamá fue formada por Totten y Trautwine en 1849 con base en una ley del Congreso de Colombia que databa de 1826 . La vía del ferrocarril de Panamá, de 77 kilómetros de largo, se concluyó en 1855, construida inicialmente en trocha de 1,435, la que ahora se llama normal, pero casi de inmediato fue pasada a cinco pies, 1,524 metros. El nombre del ingeniero Trautwine fue muy conocido entre nosotros por su manual de ingeniería. Colombia perdió ese su primer ferrocarril en 1903.

En 1855 don Ramón Santodomingo Vila y don Raúl Jimeno recibieron del Estado de Bolívar la concesión para construir un ferrocarril de Barranquilla hasta Sabanilla, ya a la orilla del mar. Luego del traspaso de la concesión, una empresa alemana inició la construcción y llegó a la actual Colombia la primera locomotora, con el nombre de ‘Bolívar’.

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